Perfecta es ésta mañana de verano que nos ve amanecer. Hermoso te veo a vos durmiendo en mi cama. Recorro y adoro cada parte de tu cuerpo, tus heridas y cicatrices. Me gusta recorrer tu espalda infinita con mis labios y darle forma de ramas con mi lengua, ramas que coronan nuestra libertad de entregarnos completos, sin inseguridades y sin miedos. Es una devoción. Se está convirtiendo en un capricho. Sin entender todos los porqués que surgen cuando dos almas se encuentran en la intimidad y ya nada importa, absolutamente nada. Me gusta tu piel café obscura que se mezcla con la mía y formamos los colores de la tierra, la tierra que se nos mete entre las uñas y los ojos en nuestros trabajos cuando salimos a ganarmos el pan y la vida. Me gusta verte sonriente, besarte cuando aparece en tu rostro esa sonrisa es una perdición, me puede, me gana, me deshace y derrumba los pensamientos que ya no dan para más y solo me queda entregarme, bajar la guardia y rendirme al deseo. No quiero usar tu cuerpo, no quiero dañar tu piel ni tu mente, tan solo amarte, quererte, quererte bien, vivir la utopía, sin abandonar, intentar y apostar pero sin forzar. Cuando el amor despues de un tiempo, toca la puerta de la casa solitaria que huele a pom y libros rejuntados, lo esperé como nunca tantas noches y tantos días, me permito entonces abrirle, recibirlo, abrazarlo como te abrazo a vos cuando mi forma de ser es apenas comprensible, a penas razonable y me miras confundido y prefiero entonces comerte la boca para así no intentes vagar en mis infiernos. Te prefiero perdido en mi cuerpo y no en en la perdición de mis pensamientos. Me justifico aveces en las formas aprendidas con los golpes de la vida, duro es el escarmiento que padece un ser humano enamorado cuando las cosas ya no dan para mas, cuando es preciso decir adiós, cuando es preciso darse la vuelta y marcharse. Prefiero no pensar en eso, vivo el presente por más que me cueste. Todos hemos sentido la ausencia que flota adentro como un fantasma cuando el ser amado ya no esta, cuando ya no llama, cuando ya no escuchamos su voz ni su risa, ni los chistes malos ni los buenos. Dejo que vuele ese pensamiento y de nuevo me aferro a tu espalda transpirada en esta tarde que arde como un incendio en la cama y en la sangre, yo temblorosa, la felicidad me desborda, mi cuerpo se transforma en un manantial de agua tibia, soy un río caudaloso en pleno verano, y te abrazo honrando tu presencia, honrando tu energía, honrando cada parte de tu cuerpo , honrando el tiempo compartido, quiero quedarme en tus labios, quedemos ahí aunque allá afuera todo se venga abajo…
la piel al sur
martes, 2 de febrero de 2021
Fragmentos de una pequeña historia de amor
Perfecta es ésta mañana de verano que nos ve amanecer. Hermoso te veo a vos durmiendo en mi cama. Recorro y adoro cada parte de tu cuerpo, tus heridas y cicatrices. Me gusta recorrer tu espalda infinita con mis labios y darle forma de ramas con mi lengua, ramas que coronan nuestra libertad de entregarnos completos, sin inseguridades y sin miedos. Es una devoción. Se está convirtiendo en un capricho. Sin entender todos los porqués que surgen cuando dos almas se encuentran en la intimidad y ya nada importa, absolutamente nada. Me gusta tu piel café obscura que se mezcla con la mía y formamos los colores de la tierra, la tierra que se nos mete entre las uñas y los ojos en nuestros trabajos cuando salimos a ganarmos el pan y la vida. Me gusta verte sonriente, besarte cuando aparece en tu rostro esa sonrisa es una perdición, me puede, me gana, me deshace y derrumba los pensamientos que ya no dan para más y solo me queda entregarme, bajar la guardia y rendirme al deseo. No quiero usar tu cuerpo, no quiero dañar tu piel ni tu mente, tan solo amarte, quererte, quererte bien, vivir la utopía, sin abandonar, intentar y apostar pero sin forzar. Cuando el amor despues de un tiempo, toca la puerta de la casa solitaria que huele a pom y libros rejuntados, lo esperé como nunca tantas noches y tantos días, me permito entonces abrirle, recibirlo, abrazarlo como te abrazo a vos cuando mi forma de ser es apenas comprensible, a penas razonable y me miras confundido y prefiero entonces comerte la boca para así no intentes vagar en mis infiernos. Te prefiero perdido en mi cuerpo y no en en la perdición de mis pensamientos. Me justifico aveces en las formas aprendidas con los golpes de la vida, duro es el escarmiento que padece un ser humano enamorado cuando las cosas ya no dan para mas, cuando es preciso decir adiós, cuando es preciso darse la vuelta y marcharse. Prefiero no pensar en eso, vivo el presente por más que me cueste. Todos hemos sentido la ausencia que flota adentro como un fantasma cuando el ser amado ya no esta, cuando ya no llama, cuando ya no escuchamos su voz ni su risa, ni los chistes malos ni los buenos. Dejo que vuele ese pensamiento y de nuevo me aferro a tu espalda transpirada en esta tarde que arde como un incendio en la cama y en la sangre, yo temblorosa, la felicidad me desborda, mi cuerpo se transforma en un manantial de agua tibia, soy un río caudaloso en pleno verano, y te abrazo honrando tu presencia, honrando tu energía, honrando cada parte de tu cuerpo , honrando el tiempo compartido, quiero quedarme en tus labios, quedemos ahí aunque allá afuera todo se venga abajo…
prosa para un hombre
Adoro verte con los ojos contentos,
Exaltado de alegría
En lo complicado de tu ser,
Y lo fácil que es gobernar tu cuerpo cuando estás feliz.
Tanta honestidad te parece brutal
Vos que no crees en lo imposible.
Asustadizo melancólico
Escupí de una vez el miedo que se te asoma al paladar y nublan tus pupilas
Vení entre mis senos desbordados
Asómate tan solo un rato a la incoherencia y dulzura del amor.
Vení,
Disfruto tanto acaricarte el pelo y los labios,
Mientras lleno de besos tu frente agotada y en un susurro te pido que entres en mi.
Pequeño,
Déjate amar
Ese amor que nunca tuvimos
Del que anhelamos de niños tener.
El que muchas veces creímos ilusamente haber encontrado en almas ordinarias y esclavas.
Evitamos caer con todas nuestras fuerzas para no sentir la tierra pegada a nuestros rostros y amar con arrebato y sin piedad.
Tan solo en libertad.
Déjate caer de la mano conmigo
Limpiarnos juntos las lagrimas saladas de la risa
Y curarnos ciertos dolores que aún se guardan en el corazón.
Lorena Pineda
Primavera 2020
Pintura "beso apasionado" de Joseph Lorusso
martes, 3 de noviembre de 2020
Relatos Profanos
Mis sentidos siempre fueron cautivados por el olor a flores, hierbas, palos quemados, Pom y copal sagrados. Me transformo en humo y viajo a la génesis de mi vientre. Mi útero, de donde nace la conciencia, es el lugar en el que me reencuentro con cada una de las mujeres que me complementan, Indias corrompidas que danzan en montañas y barrancos. Lavan sus negros cabellos, caudal de obsidiana que cae sobre su espalda. Bañan el relieve de sus cuerpos en cenotes y lagos a la luz del dios del sol y la diosa de la luna. Y se dejan caer en el acantilado que forman sus labios. La piel es del color de la arcilla primigenia y formadora de Kan. La sangre es roja subversiva. Esta noche de placeres irrenunciables te observa, sigilosa, esas tetas morenas , vida, dulzura y esperanza nuestra, no son bien vistas ante la cruz inquisidora, ¡salve¡ nosotras las siempre vivas hijas de Ixquic e Ixmucané, guardan el pecado esos ojos indignos, india desnuda con glifos en la piel, tu sexo amuleto de jade me llama y empiezo a excitarme otra vez. Cuando veo venirte en esos ojos rasgados de jaguar, indómita. Se cuanto te llama lo prohibido y obsceno que niegan tus dogmas, te gusta yo lo sé, a vos, amoral.
Lorena Pineda
Buenos Aires primavera 2020
edicion de fotografia Romi Luna
martes, 27 de octubre de 2020
76 aniversario de la Revolucion guatemalteca del 20 de octubre de 1944
Guatemala es un país que tenemos atravesado entre la garganta y el corazón aquellos que no encontramos perdón ni olvido en nuestra cruenta historia. De la mala suerte y desgracia de nacer en un país bello, codiciado y explotado a lo más aberrante que se ha llegado. Ese cristo negro al que tanto se ha clamado, parecía que después de 34 años de dictadura tan solo de inicios del siglo XX, al fin había escuchado.
El 20 de octubre de 1944 el pueblo guatemalteco después de sucesivas y grandes manifestaciones saca del poder al dictador Jorge Ubico, que venía hacía 14 años como presidente de Guatemala, país en donde la tiranía se propagó en el tiempo como un cáncer en el eterno retorno de la historia a los más feroces caudillismos.
miércoles, 21 de octubre de 2020
Volver al centro
Volver al centro, extraviarlo más no olvidarlo, retornar a lo que soy, al núcleo del que emana éste fuego, el mismo fuego que me abriga en las noches cuando son detestables y en las tardes cuando la luz del sol está ausente.
Evitar volver a la sensación de abandono, evito divagar en pensamientos inocuos. Entonces voy hacia las profundidades de mi torrente sanguíneo y me conjuro en silencio, entre flores, hierba y humo. Hago el amor con mi piel y mi pelo, canto canciones rebeldes y bailo desnuda en mi centro.
Si he de doler, que sea a los gritos, doler con furia y llanto iracundo, doler con rabia, doler en kilómetros de distancia, doler con lluvia bajo el cielo cuando parece colchón sucio.
Pero volver al centro, a palpar y respirar la tierra, enterrar los pies hasta las piernas-troncos, sentir el cemento del patio, el pasto del jardín, las piedras de la calle. Ir al infierno durante el día y volver pasada la madrugada a esa sabiduría trágica y su aurora, cuando me despierta el martillazo de la conciencia nihilista que descree y duda de todo. Pero no dejar de creer en mí.
Derribo las esperanzas obstinadas y las ilusiones que no lo son más cuando me quedo conmigo. Me amarro a mis sueños. Tan solo a ellos. Perderme tan solo por instantes en la mente que no tiene eco ni canción . Doler con los rayos de sol, doler en forma de alud de barro, doler hoy para ya no doler mañana.
Estoy atrapada en esta avalancha de dulzura que me consume, a rastras llego a la orilla de ese mar inmenso que llevo adentro. Océano, pantano y río soy.
Lorena Pineda
Buenos Aires primavera 2020
martes, 22 de septiembre de 2020
Poema de amor
Amor.
Esa noche irrenunciable,
Vi tu mirada y la mía encontrarse,
los dos con las manos en los bolsillos
y cierta indecisión en las palabras que dijimos
no quise preguntar lo de siempre
Intenté no hablar de lo mismo.
fuiste cálido
fuiste dulce,
sensaciones que con un golpe de suerte en la vida,
siempre han de volver.
Escribo para vos y a los que se fueron sin dejar rastros
y a pesar de estar demasiado escarmentada
y de no creer más en el amor romántico
el deseo sigue,
Dialectico.
Quiero amar desesperadamente
Y sentirlo correr entre todas las grietas que llevo en el corazón.
Por siempre latente
por siempre permanente
hambrienta siempre de amor estoy.
Cuándo me enamoro soy como un río desbordado
en el peor de los inviernos lluviosos de mi patria.
Un huracán y su ojo que nace en mi ombligo.
entre el trópico de cáncer y el trópico de capricornio de mi cuerpo.
Me gusta cuando te abrazo y siento los pies en tierra firme,
mis dudas e inseguridades de arena
se desvanecen en el reloj que controla mis pensamientos más temibles
el miedo a la distancia
el miedo a otra ausencia.
Es tanto y todo lo que pienso
ese tanto y a la vez es también todo lo que siento.
soy como una mariposa intrusa en tu patio
que emprende el vuelo cuando abres la puerta al salir a enfrentar el dia,
cuando das un paso hacia adelante
Y en tu sombra revoloteando
yo,
estoy ahí,
Recostada en tu hombro
me tomás con tu pulgar y el dedo índice de tu mano izquierda
esperando que me contiemples
esperando que me sonrías
Me entrego completa a vos
y a tu presencia en esa cama,
A la eternidad que anhelo al besarnos los labios
Tenés tantas ganas como yo de quererte,
de querernos.
Te quiero para pasar los domingos,
darnos todo el amor
Y asi aguantar la semana,
el ajuste y la discordia,
te quiero para pasar los domingos
entre lecturas dulces
Recibir el aura entre tus brazos,
despedir el ocaso entre tus mieles.
Lorena Pineda
buenos aires/ primavera 2020
domingo, 6 de septiembre de 2020
silencio
Cuando me
encuentro en silencio
y la
obscuridad me sumerge hasta los párpados
Me alejo del
mundo de sombras
que me acompañan
desde el alba.
Las
quejas
que en
procesión
pasan
oprimiéndome el pecho
Una
tras
una
y la culpa
encadenada a
un Cristo
de piedra y
hueso
sesa
Se alejan
de golpe
como un
temblor cuando pasa
y replica
y replíca
Mi corazón se tambalea
Se inclina
y se achica
Cuando no
veo luz
ni escucho
sonido alguno
Mis pensamientos caen cuesta abajo,
Se pierden, se diluyen
en la distancia al vació que es mi cabeza.
Entonces
siento.
Lorena
Pineda
Bs As
invierno 2020
lunes, 17 de agosto de 2020
soledades
Cuando me siento asi
decadente, allá abajo
No hay palabras
Tan solo las justas y necesarias
Me enoja escribir lo que siento mientras siento la cara contra el piso
Me enoja tanto,
como que me siento sola
Es soledad dijo Isabel
A donde más temo volver
Ha donde siempre he ido.
Me prefiero alegre
Y en mis bolsillos la poca fé que guardo y cierta esperanza obstinada.
Cuando estoy triste no puedo ver al sol
Me siento como Zaratustra
vencido
¡qué seria de mi suerte si no me alumbras!
Dulce astro
¡No te quedes expectante a mi descenso!
Me escondo de la luna y su belleza fulminante
Que no merezco
Ninguna estrella del cielo brilla
Cuando me siento asi
sábado, 8 de agosto de 2020
¿qué es pensar el amor sino el temor a padecerlo?
Tenerle miedo,sentirlo dentro de las uñas de los pies y detrás de los ojos.
cuando el sueño enredado anda en sus caminos
Y sentir ese fuego quemando por dentro
la angustia y el desgarro en las entrañas
Anahata con sus pétalos rotos
Para luego
Curarlo con un anillo de oro y una moneda de cobre
En aquella casa con sus gallinas negras guardianas.
lunes, 6 de julio de 2020
sensuales inviernos
Soledad, soledad, soledad; tocamos, pero estamos a distancias inconmensurables, tocamos, pero estamos solos. Un atisbo por haber recordado a Sábato la noche anterior, me despierta ésta mañana invernal. Se asoma tras mi ventana precaria y su cortina. Tan hermosa y fría. Quiero ser rica para tener calefacción en casa, pienso con los ojos ahora cerrados mientras mi mano empieza a vagar feliz entre el camino de mis senos y el vientre. Me gusta tocar mis pezones con la delicadeza que tiene un amanecer gris y la invitación que me hace a escondidas para jugar bajo las sábanas. Me acaricio el torso, la circunferencia del ombligo. Mis pechos asemejan las nubes en un día de tormenta, avecinan una gran tempestad pero esta vez lluvia y relámpagos de placeres y risitas. Paso la lengua sobre la palma de mi mano conocedora de las líneas y caminos que llevo en el cuerpo. Un recorrido inmerso en deseos si de placer se trata. Mis manos ostentan todo el amor que con ellas puedo darme. Parece una imagen dantesca cuando los dedos que se deslizan hacia dentro y mientras mi espalda se revuelca como en una tormenta infernal, de fuego y viento. Llego entonces, a la cima de ese volcán que vierte todas las pasiones. Y queman la piel, los pensamientos y los sonidos. Y sigo. Sigo como quien pierde la razón. Como quien se pierde en un laberinto en donde errante anda la conciencia, fuera de sí, casi alegre, rimbombante. ¿Qué es el placer si no esto que me produce una carcajada sinsentido?
Lorena López
Buenos Aires 2020
dibujo fascinante a lapiz de Gustav Klimt
viernes, 26 de junio de 2020
Anotaciones sobre el sistema de salud
jueves, 21 de mayo de 2020
sensaciones de cuarentena
vengo sintiendo un pesimismo y cierta carencia de todo, creo que la pérdida del sentido de la lógica y la supervivencia entre lo absurdo no es nuevo para el ser humano. No nos son nuevas estas sensaciones de los últimos días. La guerra hace estragos en la vida de los hombres y mujeres, también en los territorios que ven nacer generaciones aún manchadas de sangre. La mía. Yo no habré escuchado un misil romper mi casa, no se si es parecido a ver romperse los sueños o saber cómo muere un héroe. Veo la grilla de series que entretienen al mundo y todo es violencia, robos, mafias, cocaína, whisky, qué bien se la pasa la gente de la televisión y la del cine, me digo a mi misma, esos robos millonarios increíbles, ¿quien no quisiera robar un banco y que salga todo bien? yo si he querido. Que mal la pasamos nosotros, encima encerrados, qué poca diversión tienen nuestros cuerpos, ya nada pasa en nuestras vidas inanimadas. Andamos riendo chistes viejos, suspirando músicas pasadas de cuando fuimos felices. Caminamos entre las sombras de los cuerpos que hemos compartido, recordando viejos amantes ¡si supieran que me estoy muriendo de ganas por besar a un hombre! agarrarlo del cuello y llevarmelo a los labios! los olores aun se guardan en esa bóveda que es la memoria, ya nada pareciera nos satisface, el mundo se ha amargado a pesar de ese cielo impío, por primera vez en cientos de años, las estrellas brillan más intensamente, hasta las veo más cerca, se ha limpiado el cielo gracias a la obscuridad de nuestros pensamientos guardados, gracias a la tortura de la ansiedad de no saber mañana, al martirio de la depresión de que sea siempre la misma mierda.
¿y esta es la vida? Preguntaría mi amigo astrólogo, ¡estar perdidos, siempre perdidos! , creernos merecedores de terribles castigos divinos y pandemias que vienen cuando las hojas caen de ese árbol que promete ampararnos, nosotros rebeldes estúpidos, para nosotros siempre ha sido el fuego del infierno. Así nos han dicho, Pero no, sigo creyendo que a pesar de nuestra miseria no debemos dejar que nos roben el deseo y la alegría. Dejémonos caer dentro del abismo que nos llama y no está mal a veces hacerle caso, pues de ahí venimos, para después flotar y flotar, con el corazón hinchado de voluntad, que a pesar de las desdichas de las torturas físicas y emocionales, del ayer o del mañana, flotar y flotar, flotar livianos como el sonido de una trompeta...